El 7 de junio se celebra el Día Mundial de la Inocuidad de los Alimentos, y este año la FAO y la WHO se han unido en una campaña con el lema «Inocuidad de los alimentos: prepárate para lo inesperado». Esta campaña hace hincapié en la importancia de estar preparados para afrontar retos inesperados que podrían comprometer la inocuidad de los alimentos, desde brotes de enfermedades de origen alimentario hasta catástrofes naturales que afectan a la cadena de suministro.
La seguridad alimentaria es un pilar esencial para la salud pública y la seguridad de los consumidores. Prepararse para lo inesperado requiere una respuesta rápida y eficaz de los agentes de toda la cadena alimentaria y sistemas sólidos que puedan prevenir las crisis antes de que se produzcan. En este contexto, la certificación desempeña un papel crucial para garantizar la seguridad alimentaria.
La importancia de la certificación en la seguridad alimentaria
La certificación de la seguridad alimentaria es un proceso que valida que una organización sigue prácticas estrictas y normalizadas para garantizar la seguridad de sus productos alimenticios. Certificaciones como ISO 22000, FSSC 22000 y APPCC (Análisis de Peligros y Puntos de Control Críticos), IFS Food y BRCGS Food proporcionan un marco estructurado para identificar, evaluar y controlar los posibles riesgos para la seguridad alimentaria.
Prevención y control
La certificación garantiza que las empresas identifiquen los peligros potenciales en cada fase del proceso de producción y establezcan puntos de control críticos para mitigar estos riesgos. Este tipo de enfoque preventivo es vital para estar preparados ante lo inesperado, reduciendo la probabilidad de contaminación y brotes de enfermedades.
Cumplimiento y confianza del consumidor
La certificación también garantiza que las empresas cumplen las normas internacionales y los reglamentos locales, proporcionando una base sólida para la seguridad alimentaria. Esto protege a los consumidores y aumenta su confianza en los productos que consumen. En tiempos de crisis, esta confianza es esencial para mantener la estabilidad del mercado y la lealtad de los clientes.
Resistencia de la cadena de suministro
Otro beneficio crucial de la certificación es la resistencia de la cadena de suministro. En situaciones inesperadas, como catástrofes naturales o pandemias, las cadenas de suministro certificadas están mejor preparadas para responder y adaptarse rápidamente a los cambios. La certificación implica que las empresas cuentan con planes de contingencia y sistemas de gestión de crisis bien definidos, lo que es vital para minimizar las interrupciones y garantizar la continuidad del suministro de alimentos seguros.
Por ello, este Día Mundial de la Seguridad Alimentaria nos recuerda la importancia de estar preparados para lo inesperado. La certificación de la seguridad alimentaria es un componente esencial de esta preparación, ya que proporciona un sistema sólido para prevenir, controlar y responder a las crisis. Invertir en certificación no sólo protege la salud pública, sino que también refuerza la confianza de los consumidores y la resistencia de la cadena de suministro, garantizando que, incluso ante lo inesperado, se mantenga la seguridad alimentaria.
El equipo Agrifood de APCER está a su disposición para ayudar a las empresas alimentarias a obtener la certificación!